Creado en: octubre 26, 2021 a las 08:38 am.
Jesús Evaristo Gómez Cairo, de Cuba, folklore y patrimonio.
El 26 de octubre de 1949, nace en Jagüey Grande (Matanzas, Cuba) quien desde 2018 se reconoce Premio Nacional de Música por su trayectoria investigativa como Musicólogo, fungiendo también como pedagogo y conferencista, el miembro de la UNEAC Dr. Jesús Evaristo Gómez Cairo. Estudioso de la musicología cubana, comprende libros, ensayos y otras publicaciones que resaltan la creación de Ernesto Lecuona, Benny Moré y Leo Brouwer; también ha enfatizado en la obra de Alejo Carpentier en repetidas ocasiones, expresada en las investigaciones Mozart en Alejo Carpentier, El Pensamiento Musicológico de Alejo Carpentier –por el que mereció el Premio “Razón de Ser” que otorga la Fundación que lleva su nombre– y Alejo Carpentier, musicólogo cubano y universal.
Han sido objeto de conferencias en universidades y escuelas de música en Alemania, URSS, Nicaragua, México, Venezuela, España, Italia, Polonia, Colombia, Estados Unidos y República Dominicana, sus estudios de folklore iniciados en el Instituto Estatal de Teatro, Música y Cinematografía de Leningrado (URSS), en el período 1975-1981 con su aspirantura en Musicología y Folklorística. Terminados tales estudios y hasta 1986, impartió Teoría del Folklore en el Instituto Superior de Arte (ISA).
Con una carrera enfocada en el Rescate, Plasmación y Difusión del Patrimonio Musical Cubano –llevando a su cargo el Programa con dicho nombre–, desde 1989 dirigió el Centro de Información y Documentación Musical “Odilio Urfé”, la institución primera del país encargada de la preservación, estudio y difusión del patrimonio musical nacional y desde 1998 es Director del Museo Nacional de la Música y Vicepresidente del Instituto Cubano de la Música (ICM).
Ante la interrogante ¿qué papel debe jugar el Estado en la salvaguardia del patrimonio musical y en el incentivo a la creación contemporánea?, planteada en el Primer Seminario Iberoamericano de Políticas Musicales en Bogotá (noviembre, 2009), Cairo asistió como conferencista y representación cubana de lo que se planteó como antecedente del III Congreso Iberoamericano de Cultura, llevado a cabo por la Fundación Gabriel García Márquez en 2010.
En el Seminario, Jesús Gómez Cairo –como se ficha comunmente– fue abajo firmante del acta resultante de acuerdos como: “Fortalecer los mecanismos para la investigación, documentación y divulgación de la memoria musical de los países iberoamericanos”, “Desarrollar un instrumento aplicable en el corto plazo que facilite las condiciones de movilidad de músicos, pedagogos musicales, investigadores, gestores y estudiantes del campo de la música en la región” y “Fomentar la circulación de manifestaciones musicales en esferas no favorecidas por la industria musical”.
En la revista digital cubana La Jiribilla, estudios suyos que decantan en investigaciones y ensayos, plasman su interés y labor para con la cultura y su salvaguarda. Breve historia del Himno Nacional de Cuba se muestra como un desempolvo de la autenticidad o no, de la letra y música, de la actual Bayamesa entonada por los cubanos como himno de la nación, establecido en la Constitución del 40, y reafirmado por el Decreto №74 del estado socialista.
En el ensayo sobre el Símbolo patrio, relata el proceso creativo de lo que declara un guion músico-literario en su estado partitura –no cumpliendo con la totalidad de los cánones para ser llamado así–, la sucesiva desaparición del mismo entre las cenizas del 12 de enero de 1869 y posteriormente, acreditando su supervivencia manuscrita bajo el cuidado de Adela Morel, copia que hoy se atesora en el Museo Nacional de la Música; argumentando tal historia con su variado proceso de musicalización, objetivo primordial de su tesis.
Otros textos de Cairo en la revista, siguen el patrón investigativo o ensayístico, siempre arraigado en la cultura musical cubana o sus cultores, como su ensayo construido sobre la base de lo que denomina Leonardo Acosta y su otra visión de la música popular cubana, donde resalta elementos con los que definitivamente coincide de la tesis del investigador, sobre la transculturación, fusión e hibridaciones, y nacimiento de nuevos géneros (los ya clásicos), a los cuales añade su visión.
Desde 2010, Yoan Zamora y Yusmaidi Marrero Núñez organizan en Ciego de Ávila el Simposio Nacional de Patrimonio Sonoro, del cual ven a Cairo guía espiritual y a su labor columna vertebral para su esparcimiento verdaderamente Nacional –aunque el aire de la última edición virtual ya le extendió a Latinoamérica–, en el que se debe centrar más la atención institucional. En el Simposio reafirmó su compromiso haciendo presentes –tal cual lo suscribió– “algunas ideas y conceptos sobre el patrimonio musical en sentido abarcador”, fragmentos extraídos de su más reciente libro.
Es miembro fundador de la Comisión Nacional de Investigaciones Musicales del Consejo Nacional de Cultura; miembro de la Comisión Organizadora del Festival de Arte Popular (1973); miembro del Comité Preparatorio del Festival de las Culturas Negras y Africanas (1975); Vice Presidente de la Comisión Organizadora del Encuentro Nacional de Jóvenes Músicos (1979), y fundador del concurso Festival Internacional de Guitarra de la Habana (1982).
Sirva este leve y discreto bosquejo de su obra, enfatizado en su acción por la salvaguardia del patrimonio sonoro y el folklore, para reconocer sus 72 años de vida y al menos 59 dedicados a estudiar la música cubana.