Creado en: julio 10, 2024 a las 12:32 pm.

“Génesis-Apocalipsis”, un diálogo entre el mar y la tierra

Por: Laura de la C. González Trujillo

Preocupación por el entorno, la ecología, por el hombre, inquietudes de corte filosófico, reconoce Margarita González Llorente, curadora del Museo Nacional de Bellas Artes, en “Génesis-Apocalipsis”, muestra de Juan Carlos Pérez Balseiro, que se exhibe en la Galería Pedro Esquerré. 

En esta propuesta se compendia un ciclo vivencial de experiencias artísticas transcurridas durante sus últimos 20 años de creación, se devela un registro visual notorio donde se integran y reconstruyen diversos recursos expresivos, aunque el lenguaje del video arte marca la pauta que asume para generar la totalidad de su discurso, argumentó Yamila Gordillo, curadora de la muestra. 

A decir del autor de la muestra, el video arte lo emplea como un laboratorio natural, que le permite observar el comportamiento de las diversas materias terrestres que sumerge en un entorno acuático, para conformar en un solo paisaje, un híbrido entre lo que habita en el mar y lo que habita en la tierra.

De este diálogo inusual, entre diversas texturas, derivo obras de diferentes manifestaciones como la instalación, la pintura métrica, el dibujo, escultura, performance y fotografía intervenida, de las cuales hoy 23 conforman esta muestra, precisó. 

Aseguró el artista- quien es miembro de la UNEAC desde 2003- que en su creación existe una estrecha relación con los temas ecológicos; se plantea la interacción de los individuos con los elementos de su hábitat, así como también aspectos referidos al cambio climático y en particular su repercusión en Cuba con el ascenso del nivel del mar.  

El título-explicó-, alude por una parte al inicio y punto de partida de la vida en el mar, y por otra, al sentido de muerte y síntomas de la situación de crisis en el siglo XXI en lo económico, político y cultural. 

La obra de Balseiro destaca en el caso de los hundimientos, por sus paisajes performáticos, algo sui generis dentro de la plástica cubana, en su pintura y dibujo encuentra presencia el tema femenino, tal vez algo de abstracción y siempre el mar, estimó González Llorente, del que toma sus peces, sus movimientos, tranquilidad y transparencia.