Creado en: agosto 9, 2021 a las 07:54 am.
Martí y Fidel pintados por duendes de colores
De las pequeñas manos de Samuel Alejandro Batista Guevara renace el hombre sincero, el héroe de entrañas nobles y gigantes que le regaló a los niños la Edad de Oro. De las páginas de la historia se nutrieron los trazos del trinitario de 8 años, para que sus pinceles mostraran al Martí: autor intelectual del Moncada, en una exposición a la que los cibernautas pueden acceder, a través del perfil institucional de Facebook de la Casa de Cultura Julio Bartolomé Cueva Díaz, de la Ciudad Museo del Caribe.
De las paredes del añejo inmueble cuelgan las 10 obras de acrílico sobre cartulina, que da fe del empeño del instructor de Artes Plásticas Yunior Cabrera Landestoy, quien desde hace 16 años tiñe la vida de los infantes con inquietudes artísticas que tocan las puertas del mencionado centro cultural.
«Martí es nuestro Héroe Nacional. Era un hombre bueno, que quiso mucho a los niños y nos dedicó sus libros. Por eso me inspiró mucho pintarlo. Me apoyé en sus escritos y en las frases expresadas por él», cuenta el integrante de la unidad artística Duendes de colores, mientras su mirada se incrusta en las creaciones que, por cerca de un mes, le ocuparon el tiempo.
Junto con Samuel, una docena de niños trinitarios participan en la fiesta de los colores, que, desde hace dos años, convirtió en anfitrión a Cabrera Landestoy, el instructor que no les ha soltado las manos a sus alumnos en tiempos de pandemia.
«En la exposición Martí: autor intelectual del Moncada hay una obra de las niñas Disleni Sabrina Monteagudo, y otra de Ana Sofía de León. Creo importante que las nuevas generaciones conozcan bien la vida del más universal de los cubanos, y qué mejor que enseñarles a través del arte», explica el responsable de que Samuel y sus amigos desarrollen habilidades pictóricas.
«Trabajar con niños es uno de los mayores placeres que he tenido hasta ahora. Es un trabajo difícil, pero con la ayuda de los padres alimentamos la personalidad de cada infante».
«La pintura les desarrolla habilidades, les ayuda a desenvolverse en la sociedad, desarrolla el pensamiento y la creatividad de los niños», asegura el instructor, quien da fe de que «el trabajo en la Casa de la Cultura de Trinidad no languidece».
«Tenemos muchas carencias, pero el compromiso con los artistas y aficionados está vivo. Hemos aprendido a trabajar con menos, pero no perdemos ni la calidad, ni el entusiasmo. Eso se ve reflejado en lo que hacemos en las Redes Sociales. Durante la pandemia hemos realizado una decena de exposiciones de artes plásticas y hemos participado en concursos, incluso nacionales».
– ¿Qué temas les han inspirado a tus alumnos durante los días diferentes que hemos vivido desde marzo de 2020 hasta la fecha?
«Dibujamos Un verano diferente que nos impuso la COVID-19. Quisimos tributarles el infinito agradecimiento a los médicos, y salieron las muestras Cuando el sentimiento nos llama y A mis héroes de blanco. De igual manera la improntadeFidel ha estado perennemente en nuestro trabajo, por eso tuvimos la expo colectiva Fidel entre nosotros».
«Martí en la música, es el título de otro grupo de obras que navegaron por las redes sociales con el auspicio de la EGREEM de Trinidad. En fin, una decena de acciones de factura trinitaria han amenizado el ciberespacio en días marcados por la COVID-19».
«Instituciones como la Galería de Arte Universal Benito Ortiz, la EGREEM -como te decía- y todo el sistema de Casas de Cultura, hemos plantado las banderas del arte para salvarnos y amenizar la vida de los niños en tiempos difíciles».
Para el comandante en jefe Fidel Castro, nada fue más importante que la vida de un niño. Por eso, los que saben querer, en Trinidad, le retribuyen el amor cuando se acerca el aniversario 95 del natalicio del Guerrillero del Tiempo. Desde la pintura, con técnica mixta en cartulina, Eriggemny Carlos Valdivia Rodríguez, otro “duende de colores”, perteneciente a la Enseñanza Especial, confirmará en el mundo virtual, quien es el Eterno comandante.
